Si crees que no vas a ser capaz de caminar los 37,2 kilómetros hasta Ávila, recuerda que en San Bartolomé de Pinares, a 14,9 kilómetros tienes albergue.
Siguiendo la avenida de la Constitución se llega al Museo de Adolfo Suárez y la Transición, se gira a la izquierda por la calle del mismo nombre, hasta la carreterilla de El Burguillo que se cruza, continuando por la calle que está enfrente, dejando a la izquierda unas bodegas. A los ciclistas se les aconseja seguir por la carretera, a pesar de los desniveles en la subida y bajada del puerto de Arrebatacapas.
Por el camino ancho marcado como C-3, C-9 y Cº Valencia-Santiago de Compostela, se suben unos 300 metros. En la curva se abandona el camino ancho y se sigue de frente el sendero de pequeño recorrido (PR), marcado con los colores amarillo y blanco, hasta la defensa metálica de la carretera: en este punto está el kilómetro 39. Se cruza la carretera y se sigue de nuevo la senda con marcas de PR y flechas amarillas. A partir de aquí fíjate en el suelo que pisas porque caminarás sobre camino medieval, con el empedrado perfectamente conservado, y así, sin darte cuenta, habrás llegado al Puerto de Arrebatacapas (cuando soplaba el viento se llevaba las capas de los aldeanos y de los peregrinos), habiendo salvado un desnivel de 250 metros en tan solo 1,8 kilómetros. En este punto se cruza la carretera y se entra en una senda siguiendo el C-5, sendero de pequeño recorrido, y el GR 10-3, sendero de gran recorrido, hacia la fuente de La Lastrilla. Desde allí se sigue por la Cañada Oriental, hasta la Fuente de la Pizarra, al lado del arroyo del mismo nombre, que atraviesas y sigues de frente sin salir a la carretera. En este punto el camino vuelve a subir pegado a la valla y se sigue por él unos 2 kilómetros, debiendo salir a la carretera, a la altura del kilómetro 27. No olvidar cerrar la portela al salir. Se camina unos 100 metros por la carretera y a la derecha se encuentra otra portela que hay que abrir y volver a cerrar. Se sigue este sendero marcado con las flechas amarillas que te lleva hasta la carretera AV-P 307, kilómetro 9, que debes de cruzar para entrar en otro recinto vallado. Se abre otro portón de ganado que luego debes cerrar, y nada más entrar, a la derecha, hay una senda con piedras y rodadas, que hay que seguir. Al principio va paralelo a la carretera que hemos cruzado, luego se va desviando hacia la izquierda, pasando al lado de cercas de piedra, hay que fijarse bien en las flechas amarillas y en las cintas que están colgadas de algunos arbustos. Cuando te des cuenta estarás pisando calzada romana y contemplando el pueblo de San Bartolomé al que entras por la parte Norte, al lado de la ermita del Cristo de la Vera Cruz, después de pasar por una fuente y moles graníticas. El paisaje no decepciona.
Desde Cebreros a Ávila, la Diputación Provincial de Ávila, también ha señalizado este itinerario como Ruta Teresiana: “Ruta de los caminos y posadas”.